Cielo y Tierra: Consagración al Inmaculado Corazón de María El Papa Francisco...

Cielo y Tierra: Consagración al Inmaculado Corazón de María



El

Papa Francisco consagra el mundo al Inmaculado Corazón de María, este 13 de

octubre (aniversario de la última de las apariciones de la Virgen de Fátima,

cuya estatua, traída desde su Santuario en Portugal, presidirá la plaza de san

Pedro sábado y domingo).



Renueva

así la consagración que hicieron el Papa Pío XII en octubre de 1942, durante la

Segunda Guerra Mundial, y el Papa Juan Pablo II el 13 de mayo de 1984.



Unamos

nuestra oración a la suya.



Como

al momento del cierre de esta edición no se conoce la oración del Papa

Francisco, publicamos aquí, en versión abreviada, la que hizo Juan Pablo II,

para que puedas rezarla en familia y también con tu comunidad parroquial en la

Misa dominical. Y sería ideal que ese día las familias se reúnan a rezar el

Santo Rosario por esta intención.







Consagración

de la Iglesia y el mundo al Inmaculado Corazón de María







¡Nos

acogemos a tu protección, Santa Madre de Dios!



Oh,

Madre de los hombres y de los pueblos, Tú que conoces todos sus sufrimientos y

esperanzas, Tú que sientes maternalmente todas las luchas entre el bien y el

mal, entre la luz y las tinieblas que afligen al mundo moderno, acoge el clamor

que, movidos por el Espíritu Santo, elevamos directamente a Tu Corazón, y

abraza con amor de Madre y de Sierva este nuestro mundo, que a Ti entregamos y

consagramos llenos de inquietud por el destino terreno y eterno de los hombres

y de los pueblos.



De

manera especial te entregamos y consagramos a aquellos hombres y naciones que

de esta entrega y consagración están particularmente necesitados.



Delante

de Ti, Madre de Cristo, ante Tu Inmaculado Corazón deseamos hoy, con toda la

Iglesia, unirnos a nuestro Redentor en Su consagración por el mundo y por los

hombres.



Madre

de la Iglesia, ilumina al pueblo de Dios en los caminos de fe, esperanza y

amor.



Ayúdanos

a vivir con verdad la consagración de Cristo por toda la familia humana en el

mundo moderno.



¡Oh,

Corazón Inmaculado! ¡Ayúdanos a conquistar la amenaza del mal que tan

fácilmente se enraiza en los corazones de los hombres hoy, y cuyos efectos

inconmensurables pesan ya sobre nuestra época y parecen cerrar los caminos del

futuro!



Del

hambre y de la guerra, ¡líbranos!



De

la guerra nuclear, de una autodestrucción incalculable, de todo tipo de guerra,

¡líbranos!



De

los pecados contra la vida humana desde sus primeros instantes, ¡líbranos!



Del

odio y del envilecimiento de la dignidad de los hijos de Dios, ¡líbranos!



De

todo tipo de injusticia en la vida social, nacional e internacional, ¡líbranos!



De

los pecados contra el Espíritu Santo, ¡líbranos!



Acoge,

Oh Madre de Cristo, este clamor cargado del sufrimiento de todos los hombres.



¡Que

se revele, una vez más en la historia del mundo, la fuerza infinita del Amor

Misericordioso!



¡Que

detenga el mal! ¡Que transforme las conciencias! ¡Que se manifieste a todos en

Tu Corazón Inmaculado, la luz de la esperanza! Amén.





https://www.facebook.com/media/set/?set=a.512921915448055.1073742
Etiquetas:

Publicar un comentario

[facebook][blogger]

Hermanos Franciscanos

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.
Javascript DisablePlease Enable Javascript To See All Widget