España camina hacia una progresiva pérdida de población debido al creciente envejecimiento, a la baja tasa de fertilidad y a la pérdida de mujeres en edad fértil procedentes del llamado baby boom.
Este escenario de invierno demográfico se constata en los datos del estudio "Movimiento Natural de la Población (Nacimientos, Defunciones y Matrimonios)" publicado el pasado 22 de junio por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El estudio del INE muestra que en 2014 nacieron en España un total de 426.303 niños, 588 más que en 2013, lo que implica un aumento del 0,1%, mientras en el mismo periodo se produjeron 395.045 defunciones (+1,2%), lo que deja el saldo vegetativo en 31.678 personas, el más bajo desde el año 2000, como se puede ver en el siguiente gráfico, reproducido a partir del estudio.
A la vista de la curva descendente que muestra el gráfico desde 2008, no es aventurado decir que España no tardará mucho en pasar a una situación de pérdida de la población.
Menos baby boom en edad fértil
Al mismo tiempo, si se observa el gráfico del número de nacimientos entre 2005 y 2014, se puede constatar que, desde 2008, año en que nacieron 519.779 niños (el máximo en 30 años), el número de nacimientos se ha reducido en un 18%.
Así las cosas, aunque el año pasado aumentó la tasa de fertilidad, pasando de 1,27 hijos por mujer en edad fértil en 2013 a 1,32 en 2014, lo cierto es que sigue estando muy alejada de la tasa de reposición (2,1).
Sin embargo, este pequeño aumento no afectó a la tasa bruta de natalidad, que se mantuvo en 9,1 por cada mil habitantes en relación al año anterior (una tasa muy baja), como se ve en este otro gráfico, también reproducido a partir del estudio.
Esto equivale a decir que cada vez hay menos mujeres en edad fértil (de 15 a 49 años), como a continuación detalla el mismo informe. De hecho, el número de mujeres en edad fértil pasó de 11,2 millones en 2013 a 10,98 en 2014; teniendo en cuenta que en 2009 eran 11,61 millones.
¿A qué se debe este descenso? Una de las respuesta tiene que ver con la progresiva desaparición de la generación de mujeres en edad fértil procedentes de la época del baby boom.
Hasta ahora se vivía de las rentas no tanto de tener muchos hijos como del hecho de que había muchas mujeres en edad de tenerlos. Tenían pocos hijos pero el conjunto de la población en relación a la gente mayor compensaba. Ahora, cada vez más la caída se acelerará por estos dos factores multiplicadores, el de la baja natalidad y el de la desaparición del 'efecto baby boom'.
También se puede apreciar en el gráfico de los indicadores de natalidad y fecundidad que las mujeres españolas son las que tienen menos hijos. Si se observa el indicador de fecundidad a partir del 2000 se ve el gran salto que da en relación a 1995. Este progresivo aumento es debido sobre todo al incremento de la llegada de inmigrantes.
Este fenómeno ahora está desapareciendo por dos factores: inmigrantes que marchan y mujeres inmigrantes que se adaptan al modelo de referencia de baja tasa de natalidad español.
Saldo vegetativo por CC.AA.
Por otra parte, el estudio también muestra el saldo vegetativo de 2014 por comunidades autónomas, y lo primero que se observa es que media España está perdiendo población.
Entre las que más pierden están Galicia (-10.299), Castilla y León (-9.875), Asturias (-6.213) y Aragón (-2.134); seguidas de Extremadura, Cantabria, País Vasco, Castilla-La Mancha y La Rioja, estas últimas todas por debajo de -1.000 personas.
En el otro extremo, las que muestran un mayor saldo vegetativo son Madrid (22.172), Andalucía (15.673), Cataluña (10.463), Murcia (5.946), Baleares (2.718), Comunidad Valenciana (2.565), Canarias (2.029), Melilla (1.135), y Ceuta y Navarra, ambas por debajo de 1.000 personas.
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