Un juez de Castellón impidió la expulsión de España del imán responsable de los atentados en Cataluña

(InfoCatólica) El imán debió haber sido expulsado de España en cumplimiento el artículo 57 de la Ley de extranjería, que facilita la deportación de los extranjeros que hayan sido condenados a más de un año de cárcel.

Abdelbaki es Satty había sido condenado a cuatro años de prisión por delitos contra la salud pública -tráfico de drogas-, y vinculada a dicha condena fue emitida la orden de expulsión.

Tras su salida de la cárcel de Castellón, que se produjo el 29 de abril de 2014, el ciudadano marroquí tendría que haber sido expulsado directamente del país.

El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Castellón, que se encargó del expediente, admitió en la sentencia 59/2015 del 2 de marzo de ese año los motivos invocados por el letrado del imán y el recurso contencioso-administrativo de Es Satty triunfó, lo que le valió para mantenerse en el país legalmente.

Se da la circunstancia de que el sujeto fue expulsado de Bélgica el año pasado cuando intentó convertirse en imán de una mezquita salafista en el barrio Molenbeek de Bruselas.

Durante los años que estuvo en una cárcel española fue el responsable de dirigir el rezo entre los presos musulmanes.

Addelbaki finalmente se convirtió en el imán de la comunidad de Annour, una de las dos mezquitas de Ripoll (10.000 habitantes) y fue el responsable de reclutar y adoctrinar al grupo de jóvenes de origen marroquí que cometieron los atentados.

El pueblo, conmocionado, intenta explicarse cómo unos jóvenes que estudiaban, jugaban y hablaban en perfecto catalán de payés se convirtieran en terroristas. Una mujer, tras una larga conversación con dos ancianos musulmanes, dice: «Era buena gente, buena gente». Y los jóvenes del pueblo que conocían al grupo se encuentran consternados por lo ocurrido, ya que consideraban a los terroristas plenamente integrados. La razón de su radicalizción es clara. El imán les adoctrinó y les convirtió en instrumentos de muerte.

Las fuerzas de seguridad han confirmado que Abdelbaki es Satty falleció en la explosión que tuvo lugar los días previos al atentado en la localidad de Alcanar, durante la manipulación de los explosivos que iban a ser usados para llevar a cabo un acto terrorista que habría tenido peores consecuencias del que finalmente tuvo lugar.

En el día de ayer los Mossos d´Escuadra abatieron a Younes Abouyaaqoub, terrorista que fue el conductor la furgoneta que llenó de muertos y heridos Las Ramblas de Barcelona. 

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