Cada año durante el mes de agosto, en el que las personas suelen tomar los días de vacaciones, el P. Mario Calogiuri va a las playas de la localidad de Salento, en el sur de Italia, para bendecir a los bañistas y predicar el Evangelio.
Sin embargo este año, en el marco de la fiesta de la Virgen del Mar que se celebra en la región, el también párroco de la iglesia de San Foca decidió llevar una imagen de la Madre de Dios a la playa.
Es costumbre que durante la celebración de esta fiesta en el sur de Italia, entre los meses de julio y agosto, los marineros y pescadores le recen a la Virgen para tener un año seguro y rentable.
La estatua de 1.50 metros fue colocada en un bote, en la parte superior de una escalera. Para que no se cayera por el movimiento de las olas, dos personas la sostuvieron mientras que el P. Calogiuri, usando un megáfono, rezaba el Rosario y bendecía a la gente.
El P. Calogiuri dijo al diario Urban News que la motivación para realizar este apostolado es porque la playa es un lugar “donde no se suele pensar en la religión, pero no se tiene que olvidar de Jesús”.
El presbítero indicó que busca “acercar a toda la gente posible a la Palabra de Dios y conseguir que se interesen los jóvenes e involucrarlos”.
Traducido y adaptado por María Ximena Rondón. Publicado originalmente en CNA.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 20 de julio de 2017
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